El Institut Pasteur de Montevideo (IP Montevideo) y el gobierno británico, a través de su Embajada en Uruguay, anunciaron su voluntad de trabajar juntos en un convenio que permitirá escalar la secuenciación genómica de COVID-19. Esto se logrará mediante técnicas que se están desarrollando en el país y utilizan tecnología británica. Así, el instituto podrá ofrecer ese servicio a otros países de la región que lo requieran.
El anuncio fue realizado durante un encuentro entre el director ejecutivo del IP Montevideo, Carlos Batthyány; el director académico, José Badano; el director adjunto de la Cancillería británica para las Américas y el Caribe, James Dauris; y el cónsul británico Rossa Commane. También participaron el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, y el subsecretario José Luis Satdjian.
Se tratará de un proyecto cuyo monto ascenderá a US$ 100.000 y estará a cargo del Centro de Innovación en Vigilancia Epidemiológica (CiVE), que fue instalado en el IP Montevideo en 2020 con el apoyo de los gobiernos de Reino Unido, Francia y Estados Unidos, además de donaciones de organizaciones, empresas y particulares.
Con los datos que este centro puede obtener a partir de la secuenciación del virus y su posterior análisis, los tomadores de decisiones de los distintos países pueden contar con un conjunto de herramientas para evaluar las respuestas políticas de la pandemia.
Según expresó Batthyány, es un orgullo para el instituto colaborar con un país como el Reino Unido para mejorar las redes científicas de América del Sur. “Estamos analizando el respaldo económico que ofrece el gobierno británico para impulsar la vigilancia genómica en tiempo real en la región midiendo la capacidad del instituto para hacer la vigilancia para Uruguay, además de para otros países de la región”, indicó.
Dauris, por su parte, destacó la relevancia de este convenio al asegurar que “la lucha contra la pandemia ha mostrado la importancia de la colaboración internacional”.
En tanto, el ministro Salinas dijo que con este tipo de colaboraciones, Uruguay se puede convertir en un hub regional de conocimiento científico y de valor agregado. “Muchos países en América Latina y el Caribe precisan un soporte de conocimiento y de laboratorio para hacer secuenciación genómica y el seguimiento de diferentes plagas y virus. Apostamos a la calidad del conocimiento uruguayo para ofrecerlo”, explicó.
El instituto y la embajada británica están elaborando el convenio que esperan firmar próximamente para empezar a plasmar este proyecto.